
Entre cuatro y cinco años puede tardar el
diagnóstico de Artritis Reumatoide (AR) en un paciente venezolano. Así lo
demostró un estudio realizado en el Hospital Universitario de Caracas que fue
publicado por Rheumatology International Journal en 2010. “Desde que la persona
padece los síntomas hasta que finalmente acude a un especialista, pueden
transcurrir más de 48 meses. De allí, la importancia de dar a conocer el papel
del reumatólogo en el tratamiento de la AR, así como las señales propias de
esta patología que cada día afecta más a la población”, explica la Dra. Yelisa
Finol de Briceño, médico internista, reumatólogo y presidente de la Sociedad
Venezolana de Reumatología.
La AR es una enfermedad crónica e inmunológica que
ataca al sistema musculo-esquelético, las articulaciones y algunos órganos del
cuerpo humano como riñones, pulmones, vasos sanguíneos y cerebro. “La
inflamación y el dolor articular en los huesos de las manos y los pies, así
como en otras articulaciones, con rigidez matutina que puede durar desde 30
minutos hasta dos horas, por un período de seis semanas continúas, son alarmas
suficientes para acudir a un reumatólogo”.
Hasta ahora se sabe que durante los dos primeros
años de la enfermedad se produce 50% del daño articular, por ello el
diagnóstico y tratamiento precoz de esta afección son fundamentales para
garantizarle a futuro una mejor calidad de vida a la persona. “Es de suma
importancia que el paciente con cualquiera de los síntomas antes mencionados
sea referido al médico reumatólogo. Éste debe realizar un examen
físico, así como una historia clínica a profundidad, exámenes de laboratorio y
radiografías. Todo esto permitirá dar con un diagnóstico acertado y por ende,
la aplicación de una terapia de remisión”.
Además del especialista en enfermedades reumáticas,
el fisiatra y el psicólogo o psiquiatra también deben formar parte del equipo
multidisciplinario que trate a un paciente con AR. El tratamiento farmacológico
incluirá Anti-inflamatorios No Esteroideos (AINEs) y Fármacos Antirreumáticos
Modificadores de la Enfermedad (DMARDs, por sus siglas en inglés). “Si no hay
remisión de los síntomas entre las 8 a 12 semanas luego de iniciado el
tratamiento, se procede a la prescripción de Modificadores de la Respuesta
Biológica (MRB) los cuales han demostrado una altísima eficacia. Los MRB deben
combinarse con los DMARDs para garantizar que la terapia tenga el efecto
esperado”, puntualizó la Dra. Esther Chirinos, médico internista, reumatólogo y
subdirector docente de la Unidad de Docencia e Investigación del Hospital Dr.
Rafael Calles Sierra en la ciudad de Punto Fijo, Edo. Falcón.
Según los especialistas, la AR se manifiesta con
mayor frecuencia en mujeres a partir de los 40 años. Las estadísticas señalan
que por cada tres féminas con artritis, solo un hombre la padece. “No sólo el
sexo y la predisposición genética aumentan el riesgo de sufrir de AR, también
lo hacen factores de riesgo modificables como lo son tabaquismo y la obesidad”,
finalizó la Dra. Finol.
Si ya tienes un
diagnóstico de artritis reumatoide lo importante es tomar medidas para mejorar
tu calidad de vida, aquí algunas recomendaciones:
1.- ¡APRENDE! Busca y
lee todo lo que caiga en tus manos y que te ayude a entender y conocer tu enfermedad.
Reconocimiento de los síntomas, opciones de tratamiento, cómo controlar el
dolor, papel de la dieta y el ejercicio.
2.- ¡MOTÍVATE! Céntrate
siempre en lo que se puede hacer, en lugar de en lo que no se puede. Establece
estrategias y objetivos a cumplir para conseguir vivir tu vida en todo su
potencial. Oblígate a mantenerte activo y a conservar toda la independencia que
puedas. Trabaja las emociones para desterrar la tristeza y la depresión, acabar
con la soledad y evitar los sentimientos de impotencia.
3.- ¡PARTICIPA! La vida
vale la pena vivirla. Organízate para utilizar tu tiempo y tu energía en las
cosas más importantes, y disfrútalas. Participa en las actividades diarias
(compras, visitas, trabajo, viajes, etc.) y disfruta de las actividades sociales
que te gustan.
4.- ¡CONSULTA CON TU
MÉDICO! Existen en el mercado muchos tratamientos que pueden ayudarte a
controlar el dolor y los otros síntomas de tu enfermedad.
5.- ¡COMUNÍCATE!
Convivir con una artritis reumatoide cambia la vida diaria. La enfermedad no
sólo afecta a la persona afectada, sino a todo su entorno: familia, amigos,
compañeros de trabajo... Ellos también deberán aceptar y ajustarse a los
cambios.
6.- MEDITA. Es fácil
deprimirse y desmoronarse al enfrentarse a la artritis reumatoide y sus
problemas, así como a las nuevas dificultades, a reto de ajustar tu vida a una
enfermedad crónica. Y el estrés resultante afecta negativamente a la evolución
de la enfermedad. La meditación es útil para disminuir la tensión muscular y el
estrés causados por la fatiga y el dolor.
7.- ¡VIVE! Concéntrate
en tu calidad de vida. Es imprescindible que te centres en cómo mantener la
mayor calidad de vida posible. Debes concentrarte en pensamientos positivos, en
lo que aún tienes y que puedes utilizar, en lugar de en lo que has perdido.
Fuentes: Agencia Tips
Imagen y Comunicación y www.rochereumatologia.es
Ahora puedes acompañarme de
lunes a viernes a las 7:00AM por Meridiano TV, en mi programa Gente Saludable
TV. Te espero en sintonía.
Escríbeme a gentesaludableradio@gmail.com.
Hasta la
próxima. Sonríe siempre.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario